Actitudes, no aptitudes.

Creo que será una de las frases estrella del año... sin ninguna duda. El baloncesto es un deporte de actitudes, y no de aptitudes. Vale para todo, para todas las categorías y para todos los equipos. Quizá como jugador o entrenador ahora se entiende esta frase, quizá ahora la dirás algo más últimamente. Es por encima de todo una 'filosofía' que forma parte del baloncesto, aunque a veces cueste entender, es así.

Pongamos un ejemplo, en tu equipo hay un jugador muy bueno, el mejor de este equipo, que es completo pero no tiene a ningún jugador como él. Vale, ahora también piensa que ése jugador es un destrozo de puertas para adentro del vestuario, se pelea con los compañeros constantemente y su actitud digamos.. "chulesca" repatea al resto de sus compañeros y al entrenador mismo.

¿Qué se hace? Bueno, hay dos opciones: La primera es que si el equipo es formación, hay que intentar solucionar el problema inmediatamente, teniendo siempre como estandarte la frase "Actitudes, no aptitudes". Tener claro que son niños pequeños y que pueden madurar y evolucionar, que aun están "verdes" y que es muy probable que sea relativamente fácil de resolver.
La otra es que el equipo ya sea un senior, que busque resultados... Es un jugador adulto, sabe lo que se hace... Ya han intentado solucionar este problema con anterioridad y no ha dado resultado. Pues después de intentarlo y algún que otro ultimátum... lo siento pero en mi equipo no hay espacio para él. ¿Problema? Creo que ninguno, hay mil jugadores como él, y el equipo funcionará mucho mejor.

No quiero que con este post se me malinterprete, no estoy de acuerdo con que se eche a nadie de ningún equipo, pero creo que tampoco hay que tener reparo en hacerlo si es total y absolutamente necesario. En fin, que mis disculpas si te he ofendido, señor/a lector/a.
Sé que he tenido un parón pre-vacacional, vacacional y post-vacacional... pero a partir de ahora intentaré escribir algo más de vez en cuando.

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