Llamando a la puerta desde hace muchos años está el baloncesto femenino. Hablo desde el baloncesto que veo yo, aquí en Catalunya, pero realmente podría ser a nivel estatal, puesto que pienso que será exactamente lo mismo para todos los clubs españoles. Si bien es cierto que quizás no hay tantos equipos femeninos como masculinos (o eso es lo que veo yo) también es cierto que cada año que pasa veo más pasión y más implicación hacia el sector femenino.
He de decir también que en el ambiente que estoy veo que este baloncesto crece día a día: en mi club cada año hay más ilusión, prácticamente cada fin de semana veo un partido sénior femenino, muchos de los días que entreno hay algún equipo femenino entrenando también...
Seguramente que os estaréis preguntando... ¿A qué viene todo esto? Bueno, una de las razones es que de aquí unos días se celebra el día de la mujer, y me gustaría hacer mi dedicación especial en forma de post. Sé que no es nada pero de aquí a unos días se entenderá mejor todo esto. Aunque parezca un poco misterioso, aclaro esto diciendo que igual de aquí a unos días puedo hablar con una entrenadora de baloncesto femenino, y con la que tengo muchas ganas de hablar. También lo hago por que de una vez por todas toca algo diferente que no sean experiencias mías o algún tema relacionado con la técnica-táctica baloncestística, creo yo.
A continuación os dejo un video con el objetivo de revivir la final del primer oro del baloncesto español en el Eurobasket de Peruggia de 1993. Tres de esas campeonas (Carolina Mújica, Wonny Geuer y Mónica Messa) vuelven a ver aquél partido narrado por Esperanza Solano y Charly Sainz de Aja. Sé que puede ser un poco... digamos difícil ver un video tan largo en youtube, pero bueno, nunca está de más todo lo que sea llenarse de cultura e información. Si uno ya quiere enriquecerse de esto, también puede ver en este enlace, un vídeo de "Españolas por el mundo... del baloncesto femenino" de rtve.
Pongo fin a la primera parte de este tema, con ganas de la segunda con la posible charla (tampoco garantizada). Si bien esto no es ni una introducción, el baloncesto femenino merece mucho más espacio y repercusión que esta entrada, pero pienso que mi pequeño homenaje era como mínimo obligatorio. Esperemos que esto solo sea el principio de una gran amistad, entre tú, el lector, y el baloncesto femenino.